Historias de cines y tren en el siglo XX

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Hoy el viaje que os propongo va a ser, sobre todo, nostálgico. Nos vamos a ir hasta principios del siglo XX para contaros una historia de cines y tren, cuando aún ni uno ni otro tenían ese encanto del que fueron gozando en años siguientes.

Era la moda de las pequeñas salas de cines con proyecciones que nada tenían que ver con lo que hoy en día existen. Eran apenas imágenes que se superponían una tras otra para dar la apariencia de movimiento, y, por supuesto, sin sonido alguno. Por su parte, el tren aún no había conocido sus mejores años de gloria, aunque éste estaba circunscrito prácticamente a las clases pudientes.

En este entorno, la primera película de trenes que se conoce en una sala de cine fue la que se proyectó en el año 1900 en la Exposición Universal de París. Allí, los asistentes pudieron hacer un viaje imaginado en el mítico Transiberiano cruzando las estepas rusas desde Moscú a Pekín. Pero fue en la siguiente Expo, en la de St. Louis, en 1904, cuando se generó un creciente interés en este tipo de proyecciones «treneras» con la aparición de los Hale´s Tours.

Hales Tour

Un capitán de bomberos llamado George C. Hale tuvo la genial idea de tomar la estructura de un vagón de tren y proyectar en uno de sus fondos, en una gran pantalla, imágenes tomadas anteriormente directamente desde un tren en movimiento. La gente asistía dentro del vagón sentados en sus respectivos asientos como si fueran en el mismo tren.

Un año después, en 1905, surgió el «Tren Caravana» que recorrió Bélgica tirando de un gran cinematógrafo que se instalaba en un pabellón donde se proyectaba la película.

Se perfeccionó el sistema de Hales, y se llegaron a montar concesionarios con vagones de tren con cabidas para 144 personas, donde se proyectaban películas de unos 10 minutos de duración que se tomaban desde la parte frontal de los trenes. Incluso, el vagón se balanceaba y se ponía el sonido del clásico traqueteo de los antiguos trenes.

A España no llegaron hasta el año 1909 pero en poco tiempo su éxito se propagó. El «Cinemaway«, el «Metropolitan Cinematour» y el «Wagon Cinema» fueron algunos de los más exitosos e incluso se anunciaban en los periódicos locales.

metropolitan-cinematour

En todos ellos la intención era ofrecer a su público no sólo la oportunidad de asistir a ese novedoso espectáculo de la cinematografía, sino de poder vivir en primera persona las sensaciones de lo que podría ser un viaje en tren, y conocer asimismo, lugares que de otro mundo nunca conocerían.

Fotos vía Historias cinematográficas

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Categorias: Historia del tren



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